LUNA MENGUANTE

LA LUNA MENGUANTE
Es también tiempo de -en armonía- eliminar, reducir, repeler, romper hábitos, relaciones o negocios que no estén funcionando.

El período menguante es el mejor para:
* Siempre plantar árboles y plantas perennes en la Luna menguante. El éxito de los árboles frutales depende generalmente de que hayan sido plantados durante la fase menguante.
* Iniciar, remover la composta. * Deshierbar y eliminar plagas.
* Podar las plantas a las que se desea frenar su crecimiento.
* Cocechar las raíces y cortezas destinadas a ser utilizadas en infusiones medicinales.
* Cosechar frutas, flores y semillas que van a ser almacenadas durante algún tiempo.
* Realizar todas las actividades de desidratación y secado:

Durante estos días podemos tomarnos el tiempo necesario para hacer una retrospectiva y notar qué funcionó y qué no funcionó en cuanto a lo que nos propusimos ser o hacer. Y entonces, revisar cuáles son las creencias, los sentimientos o los comportamientos que nos limitaron para que alcanzáramos el objetivo.
Estos descubrimientos serán la base para que podamos replantear o ajustar la meta en Luna nueva y emprenderla el siguiente ciclo que iniciará con la Luna creciente.
Para muchos conocedores, a veces los sentimientos son formas adictivas. Por ello darnos cuenta, soltarlos y elegir con libertad puede ser la base del bienestar.
Esta fase de la Luna es la más ideal para alejar formas de sentimientos que están siendo noscivas.

El ejercicio tendrá mejor impacto con menos esfuerzo y la digestión se hará mejor, reteniendo menos líquidos y menos grasa, así que cualquier forma de purificación del cuerpo tendrá mejores resultados.
La dieta de la Luna:

Se debe comenzar la dieta cuando la Luna entra en fase menguante. Es decir que, un día después de la Luna llena, no se ha de consumir ningún alimento sólido y beber tanta agua como sea posible (también se puede beber aguas o jugos de frutas o verduras, sin azúcar, ni aditivos. También el alcohol y la leche quedan fuera).
Esta dieta hace que el cuerpo aproveche la influencia de la luna para soltar el exceso de líquidos y de todo lo que no necesita limpiando el sistema digestivo y los poros de la piel, por lo que se pueden perder hasta 6 kg de peso, si se sigue correctamente.
Si quieres aprovechar el influjo de la luna para desintoxicar tu cuerpo, desintoxicando tu higado, haz click aquí.
La Luna menguante es también un buen momento para hacer baños de vapor, saunas y Temazcales tradicionales.
Estos son también los días para cortar las uñas, cabellos y demás vellosidades, si deseamos retardar su crecimiento.

Así, se puede aprovechar las dos semanas cuando la luna está menguando para organizar los objetos personales, deshaciéndose de aquello que:
- no sirva,
- no se use o
- no guste.
En China hay un proverbio que dice que para que algo nuevo llegue, debe haber espacio disponible.

- para la digestión, la albahaca
- para mejorar el funcionamiento del hígado, el boldo
- para disminuir el colesterol, la avena
- para depurar la sangre, el ajenjo
- además, la salvia, el jengibre, el tomillo, la lavanda y la menta son hierbas para limpieza en general.
Pueden tomarse como infusión, una taza, de una a tres veces al día.

Cuando la luna está en período menguante, es un momento para la eliminación, reducción, y la introspección.
En este ciclo se realizan los hechizos para liberar los sentimientos, pensamientos o patrones de coducta perjudiciales (por ejemplo: adicciones, enfermedades, juicios, celos, culpas y heridas).
También son propicios los encantamientos para la terminación de una relación de forma pacífica, o para cerrar de forma provechosa un negocio que no está funcionando.
Con ello, se liberará esa energía que ya no es necesaria, de modo que haya espacio para construir nuevas bases para el siguiente ciclo lunar.
Se ha de recordar que las pociones que se hace para destruir o alejar algo han de removerse en sentido contrario a las manecillas del reloj.

La diosa famosa por su representación como una mujer mayor junto a un caldero. Ella está profundamente ligada a la imagen de la Luna menguante. Su nombre se deriva de la palabra celta -cerru- que significa caldero que, al igual que la propia diosa, simboliza el poder transformador de la magia, la sabiduría, la inspiración creativa y el renacimiento. Ella también se asocia con la ciencia, la profecía y la poesía.
0 comentarios:
Publicar un comentario